El gobernador, Osvaldo Jaldo, visitó esta tarde la comuna de El Bracho y El Cevilar, en el este tucumano, en donde hizo entrega de siete viviendas que fueron construidas en el marco del programa PROMAT, del Instituto Provincial de Vivienda y Desarrollo Urbano (IPVDU), que aporta los materiales para que los propietarios construyan sus propias casas.
El primer mandatario estuvo acompañado por el ministro del Interior, Darío Monteros; el de Salud, Luis Medina Ruiz; el de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa; el vicepresidente primero de la Legislatura, Aldo Salomón; el comisionado comunal Franco Ale; la intendente de Alderetes, Graciela Gutiérrez; la interventora del IPVDU, Nora Belloni; el secretario de Obras Públicas, Juan Luis Pérez; el fiscal de Estado adjunto, Raúl Ferrazano; comisionados comunales y autoridades policiales de la Unidad Regional Este.
«Hoy se está cumpliendo el sueño de estas familias de tener el techo propio pero con una particularidad: son viviendas que se canalizan a través del IPV con la colaboración activa del municpio o comuna, en este caso con la de El Bracho y El Cevilar, en donde la Provincia entrega los materiales y la comuna y los propietarios ayudan a construir las casas, es decir que esto es un esfuerzo de la Provincia pero también de quienes van a vivir en las casas», afirmó Jaldo.
Asímismo, detalló que «con estas viviendas estamos llegando a cada uno de los lugares del interior. Estas son las primeras casas que estamos entregando y ya se definieron los cupos de las siguientes. Estas son casas que si nosotros le ponemos un valor estimativo son entre $25 y $30 millones por lo que las familias solas no las podrían hacer porque son para personas de escasos recursos. Para adjudicar las casas hay un estudio previo pero eso nos da la tranquilidad de que a las casas se las entregamos a los que más necesitan. Por supuesto que la lista de espera es grande. En la medida que las comunas y municipios agilicen la construcción de las casas nosotros los materiales los vamos a ir asignando a traves del IPV. Este es un programa muy bueno porque participamos todas las partes, y nos sacrificamos. Esto se valora mucho más».