Los nuevos beneficiarios se suman a los cerca de 16,5 millones que ya fueron alcanzados por la medida y que, según datos relevados al 16 de octubre, obtuvieron reintegros por $ 36.840 millones.
El reintegro del Impuesto al Valor Agregado (IVA) se realiza por la compra «de productos que forman parte de la canasta de alimentos, medicamentos, higiene personal y limpieza del hogar, con un tope mensual de hasta $ 18.800», recordó la Anses en un comunicado.
Asimismo, el organismo previsional señaló que «en términos del consumo, el reintegro representa el 11% de lo que los usuarios gastaron en la canasta y la medida regirá hasta el 30 de diciembre y, de ser convertido en ley, se implementará de manera definitiva».
El perfil de los beneficiarios del compre sin IVA
Del total de trabajadores informales que cobran el refuerzo, 841.162 corresponden a la provincia de Buenos Aires, 219.119 a Santa Fe, 172.091 a Córdoba, 137.754 a Tucumán, 132.218 a Santiago del Estero, 131.309 a Chaco, 119.593 a Salta, 116.876 a Mendoza y 108.123 a Corrientes.
Con menos de 100.000 beneficiarios figuran Misiones con 96.853, Entre Ríos con 79.958, San Juan con 64.768, Formosa con 57.639, Jujuy con 55.201, CABA con 52.831, San Luis con 32.781 y Río Negro con 31.390.
La lista se cierra con 28.182 beneficiarios de la provincia de La Rioja, 27.844 de Catamarca, 20.161 de Chubut, 20.061 de Neuquén,13.313 de La Pampa, 7.423 de Santa Cruz y 3.165 de Tierra del Fuego.
En cuanto al reparto etario, un 26% de las solicitudes se distribuyen entre personas de 18 y 24 años; 17% entre 25 y 29 años, 12% entre 30 y 34 años, 9% entre 35 y 39 años, 8% entre 40 y 44 años, 8% entre 45 y 49 años, 8% entre 50 y 54 años, 7% entre 55 y 59 años y 4% entre 60 y 64 años.
Respecto a la distinción de género, el refuerzo fue solicitado en un 70% por varones y en un 30% por mujeres.
El programa Compre sin IVA comenzó a regir el 18 de septiembre y consiste en la devolución del 21% de las compras de productos de la canasta básica hasta un tope de $ 18.800 mensuales, según la Resolución General 5418/2023 de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
En cuanto al universo de beneficiarios, abarca a trabajadores en relación de dependencia con ingresos de hasta seis Salarios Mínimos, Vitales y Móviles, así como quienes perciban jubilaciones, pensiones por fallecimiento y pensiones no contributivas nacionales con un máximo de seis haberes mínimos.
De esta forma, el tope de ingresos para acceder al beneficio en el caso de los trabajadores es de $ 876.000 y de $ 524.758,56 para los jubilados.
También pueden acceder a la devolución del IVA el personal de casas particulares encuadradas en el régimen especial de la actividad, monotributistas de todas las categorías, y beneficiarios de la Tarjeta Alimentar o de las tarjetas emitidas del Programa Potenciar Trabajo.
Quedan exceptuados los contribuyentes del Impuesto a los Bienes Personales, siempre y cuando no paguen el tributo sólo por la tenencia de un inmueble para vivienda única, y los trabajadores autónomos.
Cómo acceder al beneficio
Para acceder al beneficio se debe abonar con tarjeta de débito físicas de Pago Electrónico Inmediato (PEI) o a través de pagos con débito con códigos QR.
Luego de la transacción, el monto se reintegra a la cuenta bancaria asociada a dicha tarjeta en un máximo de 48 horas: dentro de las 24 horas para las compras realizadas entre las 0 y las 17 del mismo día, y dentro de las 48 horas para las realizadas después de las 17.
Una vez realizados los reintegros, estos aparecerán en los resúmenes de cuenta de cada mes con el identificador «Reintegro programa Compre sin IVA».
Se puede acceder al beneficio en los comercios registrados ante la AFIP bajo 25 nomencladores de actividades económicas, incluyendo mayoristas, hipermercados, supermercados, minimercados, fiambrerías, almacenes, dietéticas, carnicerías, pescaderías, verdulerías, mercados y puestos móviles; y comercios alimenticios especializados.
La iniciativa se extiende hasta el 31 de diciembre próximo, y busca «mejorar el ingreso disponible y, consecuentemente, la capacidad de compra de los sectores más vulnerables, quienes destinan al consumo de bienes de primera necesidad, la totalidad o gran parte de los ingresos».